Patricia van Nispen tot Sevenaer creó la fundación Microjustice en 1996 y ha desarrollado Microjustice desde entonces. Ha dirigido la organización a través de sus diferentes fases: su inicio en la antigua Yugoslavia trabajando en la rehabilitación posbélica de refugiados, el desarrollo de Microjustice como forma sostenible de prestar servicios jurídicos en la cooperación internacional al desarrollo, su inicio en América Latina y posterior desarrollo en África, y desde 2018 ha desarrollado el Barómetro de Protección de Derechos Legales y la Plataforma digital de Asistencia Legal.

Patricia siempre quiso hacer lo que hace ahora. Por eso, tras su máster en Derecho, continuó sus estudios de posgrado en Relaciones Internacionales y se inspiró para centrarse en los «aspectos humanos» de las relaciones internacionales. Según ella, una condición previa para la democracia y la paz duradera es que todas las personas estén legalmente protegidas e integradas en el sistema; por tanto, en lugar de hablar de conceptos abstractos como «Estados», hay que mirar más allá de este concepto: hay que proteger a las personas que viven dentro de ese Estado. En Microjustice ha encontrado la forma perfecta de comprometerse con esto de manera estructural. Antes de crear Microjustice, trabajó en un bufete de abogados de Ámsterdam (Houthoff Buruma; 1990-94) y con la ONU en Ruanda, Malawi y Croacia (1994-96).

Andrea León Cabrera se ha incorporado a la fundación Microjustice por su profundo espíritu de defensa de la ciudadanía y sus derechos, dando igual trato a todas las personas y colaborando en el acceso a la justicia.

Andrea siempre ha buscado plataformas que le brinden la capacidad de ayudar a las personas con sus conocimientos, los cuales ha desarrollado en una amplia experiencia laboral en el sector público y estudios en derecho constitucional, desarrollo normativo y derechos humanos.

Brindar acceso a la Justicia a los sectores más vulnerables es fundamental.

Abogada de profesión, se incorporó al equipo de Microjusticia Bolivia en 2015, estando a cargo del patrocinio legal de los procesos judiciales y administrativos de regularización y regularización de los derechos de propiedad urbana, entre otros casos que maneja la Fundación.

Actualmente, es responsable del Área Social de Microjusticia Bolivia, y su deseo es contribuir con su trabajo a la continuidad de las actividades de la Fundación, con el fin de hacer posible el ejercicio de sus derechos y el acceso a la justicia de los sectores vulnerables y de la población en general. población que utiliza los servicios de Microjusticia Bolivia.

Profesional altamente motivada por su sólido compromiso con la sociedad, busca promover un trato equitativo para todas las personas y colabora activamente en el acceso a la justicia desde el área financiera.
Tiene una sólida formación en contabilidad y extensa experiencia. Norah ha forjado sus conocimientos con el objetivo de contribuir significativamente con el desarrollo de cada una de sus responsabilidades. Su dedicación se traduce en un valioso aporte a la misión de Microjusticia Bolivia, donde desempeña un papel esencial llevando la contabilidad de manera transparente y eficiente.